De repente se me dió por pensar que sería de mi vida sin la pasión que recorre mi alma y me hace despertar todos los días, sin la lucha y la fuerza de salir adelante, sin mi convicción, sin ideal... ¡Qué vida aburrida!
Hoy me planteaba la duda entre el poder y el ideal... Porque siempre uno mantiene un ideal firme, esa convicción, y esa lucha, pero llega un momento de la historia y de la vida en el cual la unica forma de que ese ideal pueda ser implementado en la vida cotidiana para transformarse en realidad es mediante el poder.. y ahí ¿Hasta donde llegamos? ¿Qué es capaz de hacer uno por poder?¿Hasta dónde llegaremos?
Debo confesar que el ser una persona idealista no es algo del todo positivo, es algo complejo. Por un lado, es totalmente gratificante y hermoso no perder los ideales ante ningun monto de dinero, ningun tipo de poder, ninguna persona, ir adelante siempre, tomar carne de una lucha y no abandonarla, soy una convencida de que si uno hace lo que siente, lo hace con amor y ayudando al prójimo, está en el camino correcto; malo sería si uno no hiciera lo que siente. Porque así lo veo, hemos construido durante 11 años esta tan querida democracia y este camino de transformación que no lo quiero dejar, no quiero que esto cambie y dejaría la vida si es necesario por defender lo que le pertenece al pueblo. Pero acá surge un conflicto.... Cuando de política se trata es un trabajo fino en un terreno complejo ¿Y por qué? Porque la política y más que nada en este sector tan amplio que es el peronismo debe buscar consensuar entre las partes, el consenso en busca del poder y la obtencion del poder para darle un buen uso, de eso se trata ¿Pero si les digo que pará llegar al poder para darle buen uso tenés que tragarte los ideales?...
Realmente mi idolatración hacia Nestor Kirchner también está muy ligada a la inteligencia, a la estrategia, porque es algo que yo jamás podría conseguir. Nestor para asumir a la presidencia en el año 2003 tuvo que consensuar políticamente con Duhalde, un presidente totalmente nefasto para el país, ¿Y saben para qué consensuó con él? Para llegar y transformar la realidad de 40 millones de argentinos, ni más ni menos que eso. Tuvo que resistir a lo que su corazón le pedía a gritos expresar para poder hacer de todo ese ideal una realidad efectiva.
¡Pero cómo cuesta!
Quienes nacimos políticamente con estos ideales debemos aprender a resistir, a jugar, a ser estrategas si queremos incursionarnos en una carrera política, pero siempre tener adentro esto, nuestra pasión, nuestro motivo de vida. A veces se ve transgirversado, pero no debemos olvidarlo jamás, lo que nosotros queremos es justicia social, queremos la felicidad del pueblo y es verdad que el idealismo tenemos que saber controlarlo, sobre todo los jóvenes como yo, cuando vemos un político sinvergüenza y queremos gritar y que nos escuchen todos, queremos escrachar todo, pero no es la forma.
Mis compañeros grandes me dicen "¿Sabés lo que decían los montoneros? A un sistema político de lo rompe desde adentro" Lo que me motiva a no salir de él jamás. A lo que el tío agregaba "En un cuarto lleno de víboras uno tiene que saber disfrazarse de víbora y saber camuflarse entre ellas, pero sin convertirse en una".
Hoy se me abrió la cabeza un poco más, aunque creo que un joven es idealista por naturaleza. Es el joven el que tiene esa fuerza que otro no tiene de decir cada una de las cosas que le molestan sin importar con quien. Aunque a veces no tendríamos que dejar de decir "El fin no justifica los medios" Sino aprender, que a veces hay que recorrer los diversos medios sin perder jamás el fin.
La pasión de mi vida va a continuar siendo la misma, la pasión alimenta los corazones, quien no conoce de pasión no tiene corazón. Que me tilde de fanática quién quiera, ellos no pueden describir lo que siento, ni pueden conocer jamás la totalidad de lo que hago y dejo de hacer. Hablar habla cualquier ser humano con la capacidad de emitir sonidos a través de sus cuerdas vocales, pero la vida se trata de ser quien con esas palabras logra HECHOS.